Tres investigadores de la Universidad Autónoma de Sinaloa están analizando los origenes del meteoridot de Bacubirito. Carlos Ramón Moraila Valenzuela, Christopher Añorve Solano, ambos de la Facultad de Ciencias de la Tierra y el Espacio, y Emiliano Terán Bobadilla, de la Facultad de Ciencias Físico-Matemáticas, están en la búsqueda de los aspectos geométricos como el volumen y la masa, utilizando métodos geodésicos, así como la forma del cráter y su impacto.
“Estableceremos la masa y el volumen, ya que es un cuerpo irregular; necesitamos hacer mediciones precisas, estamos utilizando mediciones puntuales fotogramétricas y estamos utilizando un método actualizado de escaneo. Este equipo mide entre los 200 mil y 500 mil puntos en una sola medición”, detalló Moraila Valenzuela. En total se dieron 3 millones de mediciones en el meteorito, es decir, se tiene un cuerpo sólido en cuanto a las mediciones y estas darán la certeza de la constitución del cuerpo de meteorito.
Por otro lado, el especialista en astrofísica, Christopher Añorve Solano, comentó que con estos estudios se quiere precisar en qué fecha cayó el meteorito, “aunque se dice que fue alrededor de 5 mil años”.
El objetivo del lado astronómico es establecer la historia de este cuerpo celeste, desde que entró a la atmósfera, si se partió, o no, en varios segmentos, o si es pieza única.
Añorve Solano nombró a este cuerpo el “meteorito de hierro”, ya que gran parte de él está compuesto por hierro, pequeñas trazas de níquel, cobalto, azufre, galio, fósforo, germanio e iridio.
“Esto indica que este es un cuerpo sólido de 21 toneladas aproximadamente de la zona del cinturón de asteroides que se encuentra entre los planetas de Marte y Júpiter. Hemos calculado que la entrada a la atmósfera fue de 200 m/s, pero esto se verá cuando se concluya el proyecto”, acotó.